Conmoción en la Fórmula 1. El francés Romain Grosjean sufrió un aparatoso accidente en la primera vuelta del Gran Premio de Bahrain. El piloto fue llevado inmediatamente a un hospital tras salir de los escombros y del fuego en que acabó su auto. Felizmente su estado es estable y solo presenta quemaduras en las manos, según confirmó el equipo de Haas.
El monoplaza de Grosjean perdió el control al tratar de adelantar a uno de sus colegas. El impacto contra la barricada de seguridad fue tan fuerte que la máquina se partió en dos y generó las llamas. De inmediato se encendió el sistema de emergencia de la organización para auxiliar al francés. Esa rápida acción y el equipamiento de protección, que se degradó por la alta temperatura, fueron claves para evitar una tragedia.
La carrera del GP de Bahrain fue paralizada de momento tras el incidente. La preocupación se compartió en todos los pilotos de la Fórmula 1. «Estoy agradecido de que Romain se encuentre a salvo. El riesgo que nosotros tomamos no es un juego, para aquellos de ustedes que olvidan que arriesgamos nuestra vida por este deporte y por lo que amamos», indicó Lewis Hamilton en su cuenta de Twitter.
No fue el único accidente
El GP de Bahrain se reanudó una hora después luego de limpieza y recomposición de la zona del accidente de Grosjean. Sin embargo, el reinicio también registró otro incidente que generó tensión. El auto de Lance Stroll se volcó en la pista producto de una fricción de llantas con el monoplaza de Daniil Kvyat. Por fortuna, el piloto canadiense salió ileso y la carrera volvió a reanudarse.
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